viernes, 5 de febrero de 2010

Despedí a la lógica
como a una incompetente empleada
y abracé tus piernas
como el náufrago al madero.

1 comentario:

  1. Precioso poema, de veras que ¡Gran poeta!

    Bello homenaje.

    Saludos cordiales,

    Hasta pronto.

    ResponderEliminar